(Ni la sombra de lo que fuí)
Así que tomando antibióticos, antiinflamatorios y cremita... Anoche fué bastante dura, no pude dormir casi nada del dolor, me giraba, me dolía, me giraba "pal otro lao", me emparejaba el tema... me dolía igual, ¡chico! ¡que desesperación!, mira que habré hecho kilómetros, corrido vueltas, he penao lo que no está escrito, en la Red Bull Time Out del 2002 acabé con el culo como un mandril, ¿pero esto? en la vida... Así que he dicho, camina o revienta! y eso es lo que he hecho, después de ver la etapa del Giro (por cierto, como se nota que la gente va un poco menos y no pasa tanta gente los puertos...), he salido a rodar con la mtb para ver si al menos podía pedalear, así que me he ido con un algodonaco bien colocao y rabiando he conseguido salir, al final no sabía si había cruzado el umbral de dolor o bien, se había reventao el forúnculo de los cojones, porque la verdad, ya ni me dolía. Efectivamente, cuando "arrivo a cassa" tenía la "mahonesa" esparcida, que repugnante, pero el alivio que siento es indescriptible.
Entre tanto, mis amigos del Eurolosa se entrenan tranquilamente por las tardes y me lo restregan por las narices, pero ya les cogeré ya....
Esta semana tenía crevillente en el punto de mira, la Sierra está preciosa y nos la conocemos como nuestra (no obstante es zona tradicional de duro entrenamiento), recuerdo el Open del 96 con una super carrera de Rally en pleno julio, fué durísima y el calor haciendo de las suyas. Mañana es diferente, una maratón subiendo el Catí y bajando por el Hondón, va a ser muy muy dura...
(Mi cara lo dice todo, mañana vamos a penar por doquier)